Claudia Sheinbaum anuncia plan para proteger variedades nativas de maíz y fortalecer banco de germoplasma
En el marco del Día Nacional del Maíz, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció un plan integral para proteger las variedades nativas de maíz y fortalecer un banco de germoplasma, con el objetivo de garantizar la seguridad alimentaria y preservar este patrimonio cultural.
La mandataria destacó que la reciente reforma constitucional que prohíbe la siembra de maíz transgénico en el país es clave para evitar riesgos en las variedades nativas. Subrayó que cada tipo de maíz cuenta con una genética única que debe resguardarse. “Necesitamos un banco que guarde esos granos de maíz para que no se pierdan. Vamos a fortalecerlo con el programa que muy pronto presentaremos”, indicó.
Apoyos para pequeños productores
El nuevo plan contempla un programa más ambicioso de producción para el bienestar, que incluirá mayores apoyos económicos a productores de maíz, especialmente a los pequeños campesinos que han preservado la diversidad del grano por generaciones.
Por su parte, la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alicia Bárcena, resaltó que “México es la cuna del maíz, domesticado hace más de 9 mil años”, y recordó que en el país existen 64 razas documentadas, de las cuales 59 son nativas.
En tanto, Julia Álvarez Icaza Ramírez, secretaria del Medio Ambiente de la Ciudad de México, puntualizó que el conocimiento genético de estas variedades convierte a México en el país con el mayor banco de germoplasma in situ del mundo, lo que refuerza su papel en la seguridad alimentaria global.
Maíz, patrimonio cultural y estratégico
Sheinbaum enfatizó que sin la prohibición constitucional del maíz transgénico, estas variedades domesticadas por miles de años estarían en riesgo. “Primero por los pueblos originarios y ahora por los campesinos, se nos heredó esta diversidad. Si no la cuidamos, se puede perder”, advirtió.
Con este plan, el gobierno busca preservar la diversidad genética del maíz, apoyar a los productores y garantizar la soberanía alimentaria de México, reafirmando al país como el centro de origen de este grano esencial para el mundo.