Irán declara el fin de la guerra con Israel tras alto al fuego impulsado por Estados Unidos

El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, anunció oficialmente el fin de la guerra con Israel, luego de 12 días de intensos enfrentamientos militares que dejaron cientos de muertos y miles de heridos, principalmente en territorio iraní. El anuncio se produce pocas horas después de que entrara en vigor el alto al fuego promovido por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
En un comunicado difundido por medios oficiales, Pezeshkian declaró:
“Estamos presenciando un alto al fuego y el fin de la guerra de 12 días que fue impuesta al pueblo iraní a través de la agresión imprudente y el belicismo del régimen sionista”.
El mandatario aseguró que Israel sufrió un “castigo severo e histórico”, con daños materiales considerados como “inimaginables”. También enfatizó que el objetivo de destruir las instalaciones nucleares de Irán no fue alcanzado.
“El enemigo agresor fracasó una y otra vez en lograr sus siniestros objetivos de destruir nuestras capacidades nucleares, debilitar el conocimiento científico y provocar inestabilidad social”, agregó Pezeshkian.
Un alto al fuego con tensiones aún presentes
La guerra comenzó en la madrugada del 13 de junio de 2025, cuando Israel lanzó una serie de bombardeos contra instalaciones nucleares iraníes, intensificando luego su ofensiva en varias ciudades, incluida Teherán. En respuesta, Irán disparó misiles balísticos y drones contra objetivos estratégicos en el centro y norte de Israel.
Ambos países confirmaron el acuerdo de alto al fuego, pactado para entrar en vigor alrededor de las 7:00 horas en Israel y 7:30 en Irán. Desde Teherán, el alto al fuego fue calificado como una “derrota” para el Estado judío.
Balance de víctimas y daños
Según cifras preliminares, el conflicto dejó un saldo de 610 personas fallecidas y más de 4,700 heridos en Irán, la mayoría civiles. En Israel se contabilizaron 28 víctimas mortales, además de daños estructurales en varias regiones del país.
El alto al fuego ha sido recibido con cautela por la comunidad internacional, aunque representantes de países como China, Rusia, la Unión Europea y Arabia Saudita han solicitado que ambas partes mantengan el diálogo y eviten una nueva escalada.