Trump se reúne con el líder sirio Ahmed al-Sharaa y anuncia levantamiento total de sanciones a Damasco
En un giro significativo de la política exterior estadounidense, el presidente Donald Trump anunció este 14 de mayo el levantamiento total de las sanciones económicas impuestas a Siria, durante una reunión histórica con el presidente de facto Ahmed al-Sharaa en Riad, Arabia Saudita. Se trata del primer encuentro oficial entre un mandatario de Estados Unidos y un líder sirio en más de 25 años.
Trump justificó la decisión como una «oportunidad de grandeza» para la reconstrucción de Siria, devastada tras más de una década de conflicto armado. “Las sanciones fueron devastadoras. Estoy ordenando su fin para que Siria tenga un nuevo comienzo”, declaró el presidente estadounidense.
El anuncio se dio en el marco de una gira diplomática de Trump por el Golfo Pérsico y tras conversaciones clave con el príncipe heredero saudita Mohammed bin Salman y el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan. Ambos líderes jugaron un papel clave en el cambio de postura de Washington hacia el gobierno sirio.
Durante el encuentro, Trump también instó a al-Sharaa a normalizar relaciones con Israel, como lo han hecho Emiratos Árabes Unidos, Marruecos y Baréin a través de los Acuerdos de Abraham. La Casa Blanca confirmó que el mandatario exigió la expulsión de combatientes extranjeros en territorio sirio y cooperación para evitar el resurgimiento del Estado Islámico.
La medida ha generado reacciones mixtas. Mientras miles de sirios celebraron en las calles la eliminación de las sanciones, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, expresó su desacuerdo, advirtiendo sobre el riesgo de presencia islamista en el sur de Siria.
Cabe destacar que Ahmed al-Sharaa, quien lideró la caída del régimen de Bashar al-Assad, encabeza actualmente un gobierno surgido del grupo Hayat Tahrir al-Sham, vinculado en el pasado a Al Qaeda. Su pasado insurgente y vinculación con acciones armadas en Irak han generado controversia, aunque en esta nueva etapa busca proyectar una imagen de legitimidad internacional.
Desde Washington, se asegura que esta decisión busca reconfigurar el equilibrio geopolítico en Medio Oriente, reinsertar a Siria en la comunidad internacional y contener tensiones crecientes en la región.