Donald Trump acusa a Barack Obama de “traición” por supuesta conspiración durante las elecciones de 2016
El presidente Donald Trump lanzó nuevas acusaciones contra su antecesor, Barack Obama, a quien señaló de cometer «traición» al presuntamente liderar una operación para vincularlo falsamente con Rusia durante la campaña presidencial de 2016. Las declaraciones, sin respaldo de pruebas concretas, fueron desestimadas por la oficina del exmandatario demócrata.
En declaraciones emitidas desde el Salón Oval, Trump afirmó que Obama y su equipo intentaron “robar las elecciones” a través de una estrategia coordinada para perjudicar su candidatura. “Está ahí, es culpable. Esto fue traición”, dijo Trump. “Hicieron cosas que nadie ha imaginado, incluso en otros países”.
La acusación surge luego de que Tulsi Gabbard, actual jefa de inteligencia y cercana a Trump, revelara documentos desclasificados. Gabbard señaló que dichos archivos prueban una “conspiración traicionera” por parte de altos funcionarios del gobierno de Obama, e incluso advirtió que podrían ser remitidos al Departamento de Justicia.
Sin embargo, la evaluación de inteligencia de 2017 concluyó que, aunque Rusia intentó interferir en las elecciones mediante campañas de desinformación, piratería informática y redes de bots, no existen pruebas de que esas acciones alteraran el resultado final. Un informe bipartidista del Senado en 2020 también indicó que Rusia buscó beneficiar a Trump, sin demostrar fraude directo.
La oficina de Barack Obama respondió categóricamente, señalando que “nada en los documentos publicados desmiente la conclusión ampliamente aceptada de que Rusia influyó en las elecciones, pero no manipuló votos”. Además, calificó las acusaciones como “ridículas” y “un intento de distracción”.
Trump, por su parte, reforzó sus declaraciones con publicaciones en Truth Social, incluyendo un video falso en el que se muestra a Obama siendo esposado. El republicano también sugirió que se tomarán medidas legales contra el expresidente y sus funcionarios, calificando la investigación rusa como un “intento de golpe de Estado”.
Este nuevo episodio reaviva las tensiones entre ambas figuras políticas y forma parte del discurso recurrente de Trump sobre su campaña de 2016 y los supuestos esfuerzos del “estado profundo” por impedir su llegada al poder.